Ocupar un puesto directivo conlleva la toma de decisiones continua. La forma de tomar esas decisiones y cómo se comunican internamente son la clave para la correcta gestión de las personas que forman tu organización.
El objetivo prioritario de un empresario o directivo es conseguir resultados a través de las actividades de otros, por lo que, además de los conocimientos de su negocio, es aconsejable que se maneje bien en las habilidades de dirigir personas.
Son ejemplos de cómo debemos adaptar la dirección del negocio y que trabajamos de una manera muy práctica para mejorar las habilidades en el trabajo de dirección de personas.